Vender online puede ser una gran oportunidad, pero en un principio puede resultar una complicada aventura si no se toman en cuenta algunas pautas fundamentales. Lo primordial es tejer una estrategia de negocio que tenga como timón la idea clara de qué comercializar, para luego sí, avanzar sobre la puesta en marcha paso a paso:
1. Creá tu marca
Un nombre sobre todo, pero también un dominio de tu tienda online. Este último puede parecer sólo unas cuantas palabras, pero resulta clave para el buen funcionamiento de tu negocio.
Debés dedicarle el tiempo que se merece y recordar las características esenciales que deben tener tanto el dominio como el nombre de la marca: descriptivos, claros, y fáciles de escribir y memorizar.
2. Elegí la plataforma tecnológica
Hoy en día podés tener un e-commerce de forma muy rápida ya que existen plataformas desarrolladas que se adaptan a prácticamente todos los modelos de negocio, lo que hará que la puesta en marcha sea casi inmediata.
Si por el contrario necesitás algo más personalizado, podés desarrollar tu propio portal de ventas hecho a medida, que si bien tendrá un costo más elevado, también será más ajustado a tus necesidades.
3. Elegí los medios de pago
La idea es ofrecerle al cliente todos los medios de pago que sean posibles, pero hay tres que son imprescindibles:
- PayPal
El envío de dinero o pagos a través de PayPal es gratuito. El destinatario puede ser cualquier persona o empresa que disponga de una dirección de correo electrónico.
Paypal realiza el envío del dinero al instante, sin compartir la información financiera con el destinatario. Hoy por hoy, no contar con este sistema de pago significa perder ventas.
- Tarjeta
La opción más utilizada para pagar compras por internet son las tarjetas de crédito o débito.
Casi todos los bancos ofrecen un TPV (Terminal de Punto de Venta) virtual que podés incluir, por un costo muy reducido, en tu tienda online para procesar pagos con tarjetas bancarias.
- Transferencia
Éste sigue siendo un método muy usado debido a la desconfianza que aún tiene mucha gente a introducir sus datos bancarios en internet. Se trata de un simple movimiento de fondos entre la cuenta del comprador y la de la empresa.
4. Creá perfiles sociales
En tiempos de inmediatez, es primordial comenzar a atraer tráfico a la tienda online desde su puesta en marcha.
La creación de un blog que hable del sector facilitará la construcción de una comunidad en torno a tu negocio, pero éste debe estar acompañado con la difusión de contenidos a través de las redes sociales.
Para conseguir un buen porcentaje de visitas y ventas, tu e-commerce tiene que enfocarse en un público objetivo y ofrecer una experiencia personalizada.
Guardar preferencias, o sugerir productos relacionados, son algunos de los aspectos que facilitarán la compra y harán que los usuarios se conviertan en tus mejores.
5. Desarrollá campañas de publicidad y marketing online
Crear una tienda online y subirla a Internet es sólo el comienzo. No alcanza con dejarlo ahí, tendido al azar.
Una vez creado, lo importante es empezar con un largo trabajo de posicionamiento en buscadores, marketing online y social media. El seguimiento de las campañas debe ser diario y constante para dar con los beneficios y detectar cuáles sirven y cuáles no.
Conocer estos elementos clave te ayudarán a generar una buena planeación de tu e-commerce y llegar a tus clientes de una forma más efectiva. Para todo lo demás, podés contar con Contagram.
